(Publicado
originalmente en mi cuenta Facebook el 4 de diciembre del 2015.)
En los recuerdos, vuelvo
a esa suerte de gigantesco núcleo urbano a dos horas al norte de Santiago que
es Valparaíso, -“noroeste”, precisaría el compa Renato Fortezza, baterista de
Platillo Volador-. Estando en el mero Valpo, tuve oportunidad de reunirme con
Raúl Cabrera Hidalgo, co-conductor del
programa radial El Sueño Del Esquimal -que se transmite por Radio Placeres los
jueves entre 9 y 11 pm, hora local (87.7 FM). Conocí entonces a Claudia, co-conductora del
espacio y pareja de Raúl, quien se portó con un trago típico
de la comuna que nos calentó bastante y
contrarrestó el inmisericorde clima lluvioso que veníamos
soportando desde la noche anterior -el aguaceral no pararía sino hasta la
madrugada del día siguiente.
Pese a la brevedad
del tiempo en que estuvimos reunidos (unas dos horas, más o menos), la charla
fue intensa y fructífera, como corresponde a tres melómanos terminales. Por
desgracia, los 120 minutos se hicieron cortos para dejar en casa de estos
amigos un back up entero de todo lo que había llevado en USBs, ya que la charla
se reanudaba constantemente (revelando sorpresas por montones para todos).
Encima, por salir rápido en la mañana olvidé llevar conmigo un DVD que hace las
veces de historia de la escena peruana y un ejemplar del UnderPop... 3.1 que me alcanzase Josué Vásquez antes del viaje. Por
fortuna, si bien la descoordinación impidió que nos viésemos al día siguiente,
último de mi estadía en Concón; gracias a la cortesía de mi anfitriona Rita
Allard los esféricos llegaron a manos de Raúl.
Recíprocamente, el domingo en que regresé
a Lima estuvo Rita en Santiago para despedirme, trayéndome
de paso dos presentes de los amigos de Valpo.
El disco que
protagoniza este comentario, sin embargo, me lo obsequió Raúl el día que nos
vimos. Se trata de un CD de edición artesanal, cuyo empaque parece impreso en
el mismo material que las bolsas de papel de los supermercados -y que se abre
de forma parecida al Aves De Chile de
Niño Cohete. Es el Volumen Uno (2013)
de una proyectada serie de ejercicios recopilatorios editados por el sello
Placeres, asociado a la radio y que se mueve siguiendo el mismo activismo
artístico-sonoro que ésta -rigen el credo de escudería y emisora consignas que
podríamos clasificar como bakunianas: “Contra El Monopolio Comunicacional”, “Piratéalo”...
Todo esto me recuerda bastante la breve pero intensa, maravillosa experiencia
de la peruana Coordinadora Sonidos De Acción, que operaba desde coordenadas
punk y hardcore a los gritos de “Piratea Y Difunde”, “Desobediencia Contra Su
Control”, “Sonidos De Revueltas Producen Revueltas”.
Volumen Uno está estructurado como si fuese una larga
sesión de radio, pues se dejan oír varias cuñas a través de sus 66 minutos. El
hecho de colar 23 pistas, así como las características descritas en el párrafo
anterior, parecía prometer una jornada de rancio punk marca 77 y años posteriores.
No fue así. He escuchado a grupos que rockean utilizando la distorsión, que
facturan un pop honesto, que abordan sonoridades distintas a las usuales
(Evelyn Cornejo con el bolero acelerado de “Planta Medicinal”, Juan Pablo
Cabello y el coqueteo con el rai arábigo de “Coco Schumann”); que reivindican
no sólo una estética, sino una ética asociada -la forma más pura y transparente
de lo que debería entenderse como Arte, así, con mayúsculas... De todos ellos,
a los únicos que conocía de antemano eran El Sueño De La Casa Propia: los demás
han comportado descubrimientos en uno u otro nivel.
Reconforta, y
mucho, saber que aún hoy y desde diversas latitudes se cree en el trabajo de
bases, en la capacidad transformadora de una fuerza indestructible que nació en
los 50s, en el trabajo honesto, causa y efecto del activismo artístico; en
pelear las batallas que uno/a hace suyas sin que interese verga el malhadado
capital -y sin tener que sonar formulaico/a o anquilosado/a.
Para rematar esta
suscinta review, elijo a Pintocabezas y su “Son Bestias”, quienes rompen fuegos
amparados por Salvador Allende y una frase que recordar a toda hora: “Ser joven
y no ser revolucionario es una contradicción hasta biológica”.
Hákim de Merv
jeje para la próxima venida te esperamos en nueva casa con más "navegao" u otra cosilla. Saludos!
ResponderBorrarMercy beaucup, mon ami!!!! Jusque là!!!!
ResponderBorrarSi mucho más navegao y más discos por supuesto.
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